Los Castillos durante el Renacimiento
A partir del siglo XVI, la forma y función de los castillos evolucionó en dos formas distintas, según las necesidades del propietario. Por una parte tenemos los clásicos castillos-fortaleza cuya función es la de proteger a sus habitantes, y por otra los castillos-residencia, utilizados como hogar o incluso como residencia veraniega (como es el caso del suntuoso castillo de Haar). En el caso de estos últimos, apenas se le daba importancia al aspecto defensivo, siendo más importante la ostentación del lujo gracias a la ornamentación y el diseño.
Algunas características que definen estas estructuras son la casi total ausencia de murallas y foso (en algunos casos inexistente), la transformación del Patio de Armas en una zona de esparcimiento, la supresión en muchos casos de las almenas y una mayor delicadeza a la hora de diseñas la Torre del Homenaje, incluyendo grandes ventanales en lugar de los estrechos ventanucos para lanzar flechas.
Los castillos-residencia eran a menudo utilizados como lugares para la celebración de fiestas, exclusivas de la alta nobleza, y también como punto de partida para celebrar cacerías por las tierras circundantes. Tan importante era la ostentación del título nobiliario y la riqueza, que muchos terminaron por convertir estos castillos en palacios y mansiones, aun con el elevado coste de mantenimiento que traían consigo.
Pero los castillos-fortaleza también debieron adaptarse a los tiempos, debido a la invención de nuevas máquinas de asedio, así que se ingeniaron otras maneras de construir las murallas y las torres, más redondeadas en sus formas para absorber mejor los impactos. A partir de esta época, la forma de los castillos comienza a ser más cerrada, abundando las torres cilíndricas en la estructura principal. Tenemos un buen ejemplo de ellos en el castillo que guarda el puerto de La Rochelle, en Francia.
De estos siglos proviene un nuevo tipo de fortificación defensiva, cuyas murallas se inclinan hacia adentro para resistir mejor el impacto de cañones o armas de asedio, y fuertemente dotados de artillería. Nos referimos a los baluartes, construidos en lugares clave para la defensa de ciudades o puertos.
Foto vía: CaptainHaddock
Categorias: Información